Esta clara alusion al subsidio, o sea,salarios mensuales a los indigentes, no es la solución del problema social de nuestros paises. El ex gobernante uruguayo evoca su experiencia en métodos més beneficiosos que el simple hecho de repartir dinero público a sectores carenciados.
Su propuesta para el crecimiento económico difiere notablemente de los discursos de la izquierda. En nuestro país estamos atravezando por una crísis de identidad más pronunciada que antes.
Con el advenimiento de nuevas corrientes políticas con poder de decisión gubernamental el riesgo es mayor. Los ejemplos ajenos sirven en este caso. En uruguay existe una amplia concertación y las politicas públicas encuentran a todos los sectores con similares ideas que convergen finalmente en beneficio de la Nación.
Propone pagar al Fondo Monetario Internacional cuanto antes, arreglar las deudas, no nacionalizar nada, privatizar algunos servicios, aceptar la economía de mercado tal cual es y no introducir ningun cambio fundamental en la economía.
Tal vez para los paraguayos la experiencia uruguaya sea la más apropiada. Pero la cuestión mas sustanciosa del pensamiento de Julio Maria Sanguineti es esta :Evitar que se multipliquen los mendigos presupuestados. A nadie escapa que el crecimiento de la pobreza en los paises del tercer mundo es la piedra mas molestosa en el zapato del gobierno, cuya responsabilidad es enfrentar las desigualdades desde su raíz con salud, educación y vivienda.
Conocemos los programas que existen en tal sentido, bien diseñados en los papeles , pero seguimos en el intento.
Avazamos de manera muy lenta en la concreción de metas y nos desgastamos demasiado en discursos. Lamentablemente las instituciones y los partidos politicos no pueden desprenderse aun del anacronismo y las rencillas que obstruyen nuestro desarrollo integral. si hoy existen numeros favorables en nuestra economía son atribuibles a sectores especificos cuyos rubros son apetecibles en el mercado internacional.
El momento y la circunstancia son factores tangibles que bien aprovechados pueden cambiar el rumbo de un país.
Por eso, hoy nos preguntamos: ¿ No sera este el tiempo de Paraguay? . La receta del Dr. Sanguineti no es infalible , pero en ciertas ocasiones las experiencias ajenas dejan sus enseñanzas. Su pensamiento es progresista, moderno y por sobre todo patriotico.
Hasta la próxima
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